Puertas

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  Existen dos puertas... una ancha y otra angosta. La primera no es para gordos y la otra para flacos (hablando físicamente).

  La ancha te lleva a la perdición eterna, a la separación de DIOS; en cambio la angosta te lleva a la vida eterna con el SEÑOR, a la mansión gloriosa que JESÚS está preparando a los suyos.

  Por la ancha puedes entrar de muchas formas, ya sea siguiendo en pecado y morir en esa condición, diciendo ser cristiano sin serlo en verdad.

  Por el contrario, la angosta tiene una sola forma para poder entrar, solo existe una llave. Esa llave es JESUCRISTO, quien murió por ti y por mí, para que nuestros pecados sean borrados y podamos estar con DIOS.

  Dice el evangelio según San Mateo, en su capítulo 22, versículo 14...

  "Muchos son los llamados y pocos los escogidos".

  Y esto es, porque muchos no aceptan esa voz del SEÑOR y siguen con su egoísmo, siguen pensando que están bien cuando en realidad el SEÑOR dice que no. Aquellos que están en esa condición van por esa puerta ancha.

  Pero si tú aceptas esa voz que te llama, entonces entrarás por la puerta estrecha.

  Si aceptas a JESÚS como tu Salvador y le consagras toda tu vida a EL cada día... llegarás a estar con el SEÑOR por la eternidad.

Mateo 7.13-14 dice:

• Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella;
• porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan.

“ESFORZAOS A ENTRAR POR LA PUERTA ANGOSTA; PORQUE OS DIGO QUE MUCHOS PROCURARÁN ENTRAR, Y NO PODRÁN”. Lucas 13:24

1. ARREPENTIMIENTO: Dejar el pecado para hacer lo que agrada a DIOS.
2. PECADO: Toda injusticia (1° Juan 5:17).

  Piensa por un momento ¿Es tu vida agradable a los ojos del SEÑOR?

A La Meta con CRISTO

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