Pasando por el valle
"Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque Tú estarás conmigo; Tu vara y Tu cayado me infundirán aliento" (Salmo 23.4).
Al igual que toda persona, los creyentes en JESÚS también atravesaremos por momentos que serán sombríos y de dolor. Sin embargo, si dejamos que DIOS nos acompañe, será posible enfrentar y superar esos tiempos difíciles.
Para esos tiempos, tenemos la seguridad de que "DIOS es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones" (Salmo 46.1). Además, el SEÑOR nos dice: "No temas, porque Yo estoy contigo; no desmayes, porque Yo soy Tu DIOS que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de Mi justicia" (Isaías 41.10).
En esos momentos difíciles y sombríos, el SEÑOR quiere enseñarnos y consolarnos; y cuando nos rendimos a la voluntad del SEÑOR, nuestro espíritu se tranquiliza y nuestra fe se fortalece.
David expresó: "Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque Tú estarás conmigo; Tu vara y Tu cayado me infundirán aliento" (Salmo 23.4).